lunes, 23 de septiembre de 2013

5 formas de reconocer a tus empleados


No es un secreto que reconocer a los empleados -ya sea dando unas palmaditas en la espalda o entregándoles un premio públicamente- es una buena práctica. Sin embargo, muchos ejecutivos batallan con esta habilidad o no le dan la suficiente importancia, señala Bill Flint, fundador de la empresa de consultoría Flint Strategic Partners. 

“Comúnmente, los líderes se enfocan más en decirles a las personas cuándo hacen algo mal, en lugar de mostrar que reconocen su trabajo”, afirma el experto. Por eso, te compartimos cinco sencillas formas en las que puedes recompensar a tus empleados y mejorar tu clima laboral:



1. Detente y habla con tus empleados

Pídeles que te acompañen a tu oficina, o tómate unos minutos diarios para hablar con algunos de ellos y agradecerles por su buen trabajo. Puede sonar simple, señala Flint, pero ese tipo de reconocimientos inesperados pueden motivar a muchas personas. 

2. Señala los hechos y logros valiosos

Motiva a los gerentes y empleados a que señalen a miembros de su equipo y colegas que están trabajando duro en un proyecto o que van más allá de sus descripciones laborales. Después, escríbeles una nota de agradecimiento o díselos personalmente. Sé específico, recomienda Flint. Premia el tipo de comportamiento que quieres que tu personal adopte diciendo, por ejemplo, “Estoy muy impresionado por la forma en la que organizaste tu agenda y lograste terminar todo antes de una hora. Aprecio mucho esa clase de eficiencia”. 

3.Recompensa las buenas ideas

Los empleados que buscan formas de ahorrar dinero o mejorar las operaciones en la empresa son activos valiosos y deben ser reconocidos. Si alguien en tu organización hace una mejora, enviar un email a toda la empresa, además de demostrar apreciación cara a cara, servirá para que los demás empleados sepan que la innovación es valorada.


4. No olvides recompensar los fracasos productivos

Algunas veces, las batallas mejor luchadas no resultan como se esperaba, pero también se merecen un reconocimiento. Si los miembros de un equipo se esforzaron al máximo en un proyecto y no tuvieron éxito o perdieron ante un competidor, es importante señalar su esfuerzo. “Probablemente se sentirán vencidos. Es tu trabajo, como dueño de la compañía, decirles que su trabajo es apreciado y ayudarlos a ponerse nuevamente en el juego”, sugiere Flint. 

5. Reconoce la antigüedad
Cuando un empleado cumple los cinco o 10 años en tu empresa, haz algo especial. Mantener a los buenos empleados es críticos para cualquier negocio que desee el éxito. Agradece al empleado y dale un pequeño regalo o incentivo para demostrar que aprecias su lealtad. 

Fuente: 
Por Gwen Moran

lunes, 9 de septiembre de 2013

¿Qué tipo de reconocimiento utilizar?


El reconocimiento al empleado es una herramienta de gestión, que refuerza la relación de la empresa con los empleados.

Cuando se reconoce a la gente eficazmente, se están reforzando las acciones y comportamientos que, la organización desea ver repetidas por los empleados coincidiendo y alineándose perfectamente con la cultura y objetivos generales de la empresa.Pero , ¿Qué tipo de reconocimiento utilizar para alcanzar nuestros objetivos corporativos?
Podemos reconocer de forma individual, a un equipo o a nivel organizacional y lo podemos hacer de dos formas, mediante el reconocimiento informal o el formal.
Reconocimiento informal

Se trata de un sistema que, de una forma simple, inmediata y con un bajo coste refuerza el comportamiento de los empleados.
Se puede poner en práctica por cualquier directivo, con un mínimo de planificación y esfuerzo y puede, por ejemplo, consistir en una tarjeta de agradecimiento, un correo electrónico, una palmadita en la espalda o un agradecimiento público inesperado.
Podríamos también desglosarlo en reconocimiento informal sin coste o con bajo coste, según lo acompañemos o no con algún tipo de premio o detalle.

¿A quien no le gusta que le reconozcan y agradezcan sinceramente por su trabajo?, además, cuando es inesperado y espontáneo, posee un efecto emocional que, alcanza de lleno al corazón del que lo recibe.
A pesar de lo fácil que parece el realizarlo, es el que menos utilizan las empresas, pues siempre existe cualquier cosa más importante para los directivos que pensar y dedicarse por unos momentos a sus empleados o colaboradores.

Reconocimiento formal

Es fundamental para construir una cultura de reconocimiento y su efecto, cuando se realiza eficazmente, es muy visible en cuanto a resultados y rentabilidad.
Lo utilizamos para felicitar a un empleado por sus años en la empresa, celebrar los objetivos de la organización, reconocer a la gente extraordinaria, reforzar actividades y aportaciones, afianzar conductas deseadas y demostradas, premiar un buen servicio o reconocer un trabajo bien hecho.

El reconocimiento formal es la base de una estrategia de reconocimiento que, nos conduce hacia la retención de nuestros empleados.

Regla del 80/20 para el reconocimiento formal

En toda estrategia de reconocimiento formal, existen dos partes diferenciadas. La parte intangible, que viene a ser el acto de presentación, donde emana la comunicación emocional y la parte tangible, que es el vínculo físico que utilizamos para hacer que la experiencia sea memorable.

Pues bien, la proporción coincide con la famosa regla de Paretto del 80/20. Tenemos que maximizar el 80% de la parte intangible, así como en el 20% restante de la parte tangible, para lograr un reconocimiento eficaz.

Un acto de reconocimiento es bueno que sea relacionado con algo tangible, ya sea regalos, premios, placas, diplomas, etc. para así vincular la memoria del logro y hacer que impulsen a sus empleados a contar la historia.
Es muy importante, la inclusión del logo o imagen corporativa de la organización, para así simbolizar al máximo la experiencia.
Por último, recuerde que un acto de reconocimiento formal no tiene por qué ser caro para ser memorable.

Dosis apropiadas de ambos

Acorde a la estrategia de reconocimiento que apliquemos, según las características de nuestra organización, utilizaremos el reconocimiento formal e informal conjuntamente y alineados con los objetivos definidos, para así implantar una cultura de reconocimiento, que reduzca costes laborales como el absentismo y la baja productividad, aumente el compromiso del personal y se convierta en una sólida y sostenible ventaja competitiva.

Todos necesitamos ser apreciados y reconocidos, pero no necesariamente de la misma forma o con los mismos obsequios.

Cada persona es única y de nosotros va a depender averiguar cual es la mejor forma para valorar su labor.

Existe multitud de ideas para reconocer eficazmente a nuestros empleados, ya sea de manera informal o formal. Dentro de una buena planificación y estrategia, las posibilidades estarán limitadas únicamente por nuestra imaginación.

Por: Raúl Abad en www.gestiopolis.com